- Curso de Esteticista de Mascotas: Introducción a la Ciencia (ex Módulo 1)
- Curso de Esteticista de Mascotas: Tutoría de casos prácticos
- Curso de Esteticista de Mascotas: Taller de Ciencias
- Momentos didácticos del Dr. Faver
- Artículos educativos
- Vídeos cortos
- Fichas informativas
- Vídeos educativos
- Consultas con un CPAe
Fuente: ¿Qué significa holístico para ti? (groomertogroomer.com)
A veces damos por sentado los efectos que tiene el marketing en lo que pensamos y creemos. Oímos algunos de estos términos tantas veces que empezamos a creer que son importantes… sepamos o no lo que significan.
En las ferias me suelen pedir un champú holístico. Mi pregunta siempre es: “¿Cuál es tu definición de holístico?”. Algunas respuestas típicas son “totalmente natural”, “sin perfume”, “sin productos químicos” o “sin conservantes”. Sin embargo, de lo que la mayoría no se da cuenta es de que todos esos son también términos de marketing. No hay leyes ni normativas aplicables a los productos de aseo para mascotas que estandaricen esos términos. Son términos que oímos comúnmente y creemos que significan algo.
Entonces, ¿cuál es la verdadera definición de holístico? En términos sencillos, se trata de cuidar del todo, no sólo de las partes individuales. En medicina, lo simplificamos para que signifique cuidar de la mente, el cuerpo y el alma… y yo sigo buscando ese producto que afecte al alma de la mascota.
Por otro lado, ser un peluquero holístico es otra historia. Podemos hablar de un enfoque holístico de la peluquería, o podemos cuidarnos holísticamente como peluqueros (o veterinarios).
Un enfoque holístico del acicalamiento es cuando consideramos el cuerpo de la mascota como un todo. Eso significa que cuando acicalamos, tenemos un entorno tranquilo y no estresante en el que las mascotas son tratadas con cuidado y cariño. Utilizamos los mejores productos que no irritan la salud de la piel y el pelo. Utilizamos agua caliente (y toallas calientes) para que las mascotas no se enfríen. Utilizamos secadores que no son ruidosos y no soplan el pelo a contrapelo, lo que puede resultar incómodo. Cuando vemos problemas en la piel, nos damos cuenta de que tenemos que ver al perro como un individuo y ser conscientes de que los problemas pueden implicar cuestiones internas o externas (o ambas) que pueden requerir trabajar con el veterinario para una resolución positiva. Éste es el enfoque natural de muchos peluqueros al cuidar de las mascotas.
El problema es que muchos peluqueros (y veterinarios) no adoptan el mismo enfoque consigo mismos. Si quieres tener éxito en tu carrera, también tienes que cuidar de ti mismo. Eso significa cuidar de tu mente, cuerpo y alma.
¿Estás aprendiendo la mejor forma de enfocar ergonómicamente la peluquería para salvar tu cuerpo o vas a ser el peluquero que se limita a perros pequeños cuando llegues a los 45? ¿Estás tomando precauciones para proteger tu oído del ruido y tus pulmones de todo el pelo que flota por ahí? ¿Estás cobrando (y ahorrando) adecuadamente para poder jubilarte algún día? ¿Has tomado clases para ampliar tu formación? ¿Te tomas tiempo para ti? Sé que nos centramos en las mascotas y su bienestar, pero si eres un desastre física, mental o económicamente, no puedes ofrecer lo mejor a tus clientes y a sus mascotas. En medicina veterinaria, consideran que estamos en un nivel de crisis: lo llaman fatiga de compasión, y la tasa de suicidio entre los veterinarios está aumentando rápidamente.
Si alguno de estos puntos te resulta familiar, es hora de hacer una autoevaluación. El tema común aquí es eliminar el estrés. ¿Qué es lo que te estresa? El primer paso para resolver cualquier problema es definirlo. Una vez que encuentro el problema, el mayor estrés para mí es luchar por no saber cómo solucionarlo. La solución aquí es conseguir ayuda, buscar más educación o abordar el problema (o dejar de ignorarlo). No tienes por qué hacerlo tú solo. Invertir en ayuda experta o seguir formándote son dos de las mejores soluciones para tu salud y bienestar. No puedes ser genial en todo. Verás que las personas con más éxito son las que no temen buscar ayuda cuando la necesitan.
El otro gran consejo es que, si tienes un problema, no lo ignores; enfréntate a él. Y cuanto más rápido, mejor. La mayoría de nosotros nos hemos quejado de la terrible cultura que tenemos en nuestro lugar de trabajo… Párate a pensar en esa afirmación: ¡nos quejamos! En lugar de hacer cosas para arreglarlo, preferimos quejarnos de ello. Si no eres parte de la solución, ¡eres parte del problema! Sé proactivo y trabaja para resolver los problemas. La cultura de nuestro entorno laboral es probablemente el mayor aspecto positivo o negativo de nuestras vidas. La mayoría de nosotros pasamos más tiempo en el trabajo que en casa, así que intenta que sea un lugar feliz.
He aquí dos ejemplos rápidos de cómo se puede realizar un cambio positivo en el entorno laboral:
- Cuando otros empleados se muestren negativos, simplemente aléjate y no participes en el drama (las mascotas entienden esto mejor que nosotros). El drama en la oficina disminuye rápidamente cuando nadie lo escucha.
- Si un cliente quiere privilegios especiales, como dejarlo o recogerlo fuera de horario, ¡no le digas que no! En lugar de eso, di sí, esto es lo que cobro y estos son mis límites. El verdadero secreto es hacer que ese coste sea lo suficientemente alto como para que estés contento de hacerlo por esa cantidad. “¿Te quedas hasta tarde? ¡No hay problema! Mi recargo estándar es de 100 $ (150 $ si no se ha acordado previamente) por la primera media hora y de 50 $ cada 15 minutos después, y necesitaré los primeros 100 $ para reservarlo”. ¿Son poco realistas esos cargos? Probablemente, pero no has dicho que no. Entonces el cliente tiene que decidir si merece la pena. Pero debes establecer estas políticas de antemano; no se trata de un castigo, sino de un elemento disuasorio.
Creo que practicar un cuidado holístico es importante; sin embargo, no se trata de un producto, sino de cómo enfocas tu mundo. Lo más importante que puedes hacer es cuidar primero de ti mismo para poder ayudar a los demás con una mente, un cuerpo y un alma sanos.